Bullying

El acoso escolar, o bullying, siempre ha existido. Pero cada vez hay más sociedades que toman conciencia de que es un problema que docentes, padres y alumnos deben detener. Así es que en Argentina, donde el 37% de los estudiantes reconoce que ha sido insultado en el último mes por sus compañeros y el 23% confiesa que lo golpearon, el Congreso aprobó el pasado jueve una ley que busca reducir los casos de violencia física, verbal o psíquica que practiquen grupos de alumnos de manera constante contra otro. El acoso escolar no es sinónimo de violencia en las aulas,  no incluye las peleas entre bandas. Se refiere al hostigamiento prolongado en el tiempo de un grupo de niños, en los que suele haber un mentor y varios ejecutores, contra un compañero de clase. Otros alumnos pueden resultar meros espectadores, pueden festejar la burla o intentar frenarla. Lo que se aconseja a toda la comunidad educativa es la tolerancia cero con estas prácticas, no dejarlas pasar sin llamar la atención. La violencia no solo ocurre en la escuela sino fuera de ella, por ejemplo, en las redes sociales. Muchas veces los niños acosados no denuncian su situación, pero existen pautas de comportamiento que permiten sospechar que están siendo víctimas de bullying, como la renuencia de asistir a la escuela o de ver a sus amigos.  

El acoso escolar se debe, fundamentalmente, a la falta de valores éticos entre los jóvenes y también a la crisis de autoridad de familias y educadores, todo ello agravado por un mal uso de las redes sociales. Realmente, es en la familia y en la escuela donde deben inculcarse principios morales, normas y actitudes, tales como la solidaridad, el compañerismo, o el respeto.
A continuación dejo una parte de una nota sobre un caso y la decision que tomo la madre de la agresora."Una madre en Estados Unidos ha decidido castigar a su hija haciéndole confesar públicamente que ha cometido acoso, lo que ha provocado una gran polémica en Internet."

 “Soy una chica inteligente pero he tomado malas decisiones en las redes sociales”, se lee en un cartel que Cara Schneider, de Carolina del Norte, ha obligado a colgarse del cuello a su hija como reprimenda por cometer ciberacoso. La nota termina con un rotundo: “El bullying es algo malo”.

Además, la joven ha tenido que vender su reproductor de música (un iPod) y dar dinero a una organización sin ánimo de lucro que lucha contra el acoso, explica el mensaje. La foto se ha convertido en viral y ha sido compartida más de 10.000 veces en Facebook." 

El bullying puede ser evitado y hasta castigado de la forma correcta, es trabajo de todos evitarlo. Muchas veces puede terminar con la muerte de la victima, puede ser llevada al suicidio.